Perú exportaba pisco hace más de 300 años a Centroamérica
La bebida peruana por excelencia, ya se exportaba bajo esa denominación a países centroamericanos, lo que confirma su calidad reconocida en otras latitudes.
Se trata de estudios de hace 40 años del historiador centroamericano Manuel Rubio Sánchez.
El Peruano Lima, 20/03/2021 Escribe: Jessica Olaechea Tejada jolaechea@editoraperu.com.pe
¡El pisco es blanquirrojo, señores! El hallazgo en Centroamérica del registro de carga de una embarcación que data de 1712 se ha convertido en la referencia más antigua encontrada fuera del Perú sobre el uso de la denominación pisco para identificar a nuestro aguardiente de bandera en el mundo y certifica, además, que se exportaba desde hace al menos 309 años.
Así, la peruanidad del pisco se abre paso y nuevos argumentos la ratifican. Una investigación del embajador del Perú en la Unión Europea, Gonzalo Gutiérrez Reinel, permite afirmar “con plena certeza y con respaldo histórico que el origen del aguardiente denominado pisco proviene del Perú y que lo exportaba desde hace más de 300 años”.
La investigación surgió a raíz de referencias brindadas por el ciudadano Manuel Villarreal, quien advirtió de la existencia de documentos de gran valía en el Archivo General de Centroamérica; con la ayuda del embajador Jorge Méndez y funcionarios de la Embajada del Perú en Guatemala pudo recopilar parte de los antecedentes.
Documentos de carga
Se trata de estudios de hace 40 años del historiador centroamericano Manuel Rubio Sánchez, quien ubicó varios escritos muy relevantes. El más impresionante es la documentación de carga de la fragata Nuestra Señora de la Soledad, que arribó, en 1712, al puerto de Acapulco, México, procedente del Callao, Perú, cargada de variados productos, comentó.
Al arribar a tierra azteca, la nave y su carga son rematadas, y el ciudadano español Juan de Recalde las compró. Pidió permiso para zarpar rumbo a los puertos de Sonsonate (El Salvador) y Realejo (Nicaragua moderna), en la Capitanía General de Guatemala, que en ese entonces ocupaba prácticamente todo Centroamérica, excepto Panamá. La solicitud fue acogida el 19 de noviembre de 1712 y en la declaración de los denominados “aprezios” o apreciación del valor de la carga que llevaba la nave y los derechos que debía pagar cada producto se detalla: “[…] a diez pessos cada votija de aguardiente de pisco […]”.
“Tenía que pagar por concepto de reexportación [de Acapulco a Sonsonate] por cada botija. Todo queda registrado en el texto de carga de Nuestra Señora de la Soledad, que llega al puerto de Sonsonate, en la Capitanía de Guatemala”, explicó Gutiérrez a la Agencia Andina desde Bélgica.
Menciones textuales
En el cálculo final del monto de los derechos que debía pagar a su salida de Acapulco se registra: “[...] las setenta votijas de aguardiente de pisco setezientos pessos”, se lee en la investigación del miembro fundador de la Academia Peruana del Pisco.
En otra sección del registro de la nave, el 22 de diciembre de 1712, De Recalde declara sobre la propiedad de los bienes que transportaba:“…Tener a bordo devajo de escotilla de dicha fragata, enparte enjuta y bien acondizionados de ella setenta votijasde aguardiente de Pisco con las marcas del margen […]”.
Toda la información del registro de la nave Nuestra Señora de la Soledad es presentada a su arribo a las autoridades portuarias en Sonsonate, en la Capitanía General de Guatemala, y se le entrega la licencia de desembarque el 2 de marzo de 1713.
Gutiérrez subrayó que los registros de la nave en Acapulco y Sonsonate “prueban de manera incontestable el uso común de las expresiones ‘aguardiente de pisco’ y ‘botijas de aguardiente de Pisco’ para denominar a la bebida del Perú, que era exportada hacia los puertos de México y Centroamérica en las primeras décadas del siglo XVIII”.
Aunque es cierto que el historiador Lorenzo Huertas halló, en el Archivo General de la Nación, el testamento firmado en 1613 por el ciudadano Pedro Manuel, el Griego, quien se afincó en Ica seducido por la calidad de sus vinos y logró producir un aguardiente de calidad, en el documento no figura la palabra pisco.
Indagación minuciosa sobre el origen
El embajador Gonzalo Gutiérrez es un apasionado del pisco, y siempre se ha dado tiempo para indagar el origen de la bebida de bandera, incluso cuando se desempeñaba como ministro de Relaciones Exteriores o ocupaba cargos en tierras lejanas, como la representación diplomática de Perú en China. Ahora acaba de publicar el documento La denominación del pisco y el comercio virreinal entre el Perú y Guatemala 1712-1715-1742, en el que expone todas las evidencias sobre la denominación de origen. “En el testamento de Pedro Manuel, el Griego, quien logró producir un aguardiente de calidad en Ica, no se menciona la palabra pisco; figura aguardiente. Todavía no se le denominaba aguardiente de pisco y eso tiene una explicación; los nombres como estos no los pone el mercado de exportación, los pone el lugar de donde se importa. Tengo la teoría que aguardiente de pisco se llamaba más en el exterior que en el Perú”, aclaró.Además, dijo, queda demostrado que había un flujo muy importante de exportación; los documentos comerciales centroamericanos prueban que el Perú no solo consumía pisco, sino también lo exportaba tan lejos como México y Guatemala.
Embajador Gutiérrez publica "La denominación de Pisco y comercio virreinal entre Perú y Guatemala, 1712-1715-1742"
psicología.com
12 de marzo 2021
Al documentar nueva evidencia del uso de la palabra “pisco” para describir el aguardiente peruano, el artículo refuerza que la A.O. de Pisco le pertenece al Perú
El Embajador Gonzalo Gutiérrez presentó nueva evidencia sobre los orígenes del pisco en “La denominación de Pisco y el comercio virreinal entre Perú y Guatemala, 1712-1715-1742”. En este artículo históricamente importante, el Embajador examina documentos comerciales de 1712 que demuestran que la palabra “Pisco” se refería a la bebida espirituosa al menos 17 años antes de lo que originalmente se creía. “Se ha documentado que la primera referencia peruana encontrada hasta el momento de la denominación pisco para el aguardiente data de 1729. Sin embargo, este nuevo descubrimiento prueba que el eau-de-vie de Perú era un producto que se enviaba desde el Perú a México y América Central con la denominación pisco desde los primeros años del siglo XVIII. Este avance notable podría ser la punta del iceberg, ya que es probable que haya más documentos comerciales anteriores a 1712 ”.
El registro de la nave “Nuestra Señora de la Soledad” en 1712 en Acapulco prueba indiscutiblemente que las expresiones “aguardiente de pisco” y “botijas de Pisco” fueron utilizadas para describir la bebida del Perú a principios del siglo XVIII. Este es el primer uso ubicado hasta el momento de la denominación pisco para identificar el aguardiente peruano en el mundo. Pepe Moquillaza, embajador de Marca Perú para el pisco, afirmó: “La referencia toponímica requerida para una A.O. proviene de la palabra quechua “pishku”. Luego la A.O. de Pisco se solidificó a través de su uso continuo durante siglos de comercio, como todas las demás denominaciones históricas del mundo, como el cognac y el champagne. Es decir, la demanda de un producto comienza a atribuir calidad a un producto desde un lugar de origen. El hecho de que el aguardiente de alta calidad con el nombre de pisco fuera exportado con esa denominación desde el Perú, incluso antes de lo que se creía, prueba fehacientemente que la apelación del pisco le pertenece al Perú
El artículo se puede encontrar en el siguiente enlace: https://www.calameo.com/read/006489525530f64ea23e4
Sobre el Embajador Gutiérrez Reinel
Gonzalo Gutiérrez es el actual embajador de Perú en Bélgica, Luxemburgo y la Unión Europea. También ha sido Ministro de Relaciones Exteriores en Perú y Embajador del Perú en China y ante las Naciones Unidas. Recientemente publicó “Pisco Elqui, el nombre engañoso”, un ensayo que revela un esquema comercial montado para eludir las regulaciones sobre el uso de nombres geográficos para designar bebidas espirituosas.